FOTO: ARV. REVISTA FRAY MOCHO. BUENOS AIRES, 9 De NOVIEMBRE DE 1920

“Entre las instituciones que el chiste cínico acostumbra a atacar ninguna posee mayor importancia ni se halla más protegida por los preceptos morales que el matrimonio, pero también ninguna otra invita más al ataque. De ahí que sea aquélla sobre la que ha caído la mayor cantidad de chistes cínicos”. [2]

Sigmund Freud (1856-1939)

Por lo menos, el humor político con alguna frecuencia al generalizar descalifica a conjuntos humanos cuando en la práctica únicamente busca hacer sobresalir a unos cuantos que ameritan la punzante mirada a los que es mejor reír que llorar.

El poeta latino Décimo Junio Juvenal (60-128) apuntó: “¿Ignoras la risa que tu simplicidad provoca en el vulgo, cuando exiges a alguien que no sea perjuro y que crea que hay alguna divinidad en todos los templos y en el ara enrojecida?”. [3]

James (Jimmy) Earle Breslin (1928-2017), exitoso periodista estadounidense, que obtuvo premios como Premio George Polk (1985) [4] y al año siguiente el Premio Pulitzer.

También en 1968 fue candidato a presidente del Concejo Municipal de Nueva York, proponiendo acrecentar el poder de los vecinos involucrados en los asuntos públicos y la creación del Estado 51 integrado por cinco distritos urbanos de esa ciudad. Obtuvo el 5% de los votos emitidos. La consigna fue: Vote the Rascals In (Aquí vote a los bribones).

“Durante siglos, las rebeliones dentro de la mafia habían sido acontecimientos duramente sancionados. Así como ningún político o legislador inteligente presenta su candidatura a menos que sepa por adelantado que contará con votos a su favor, así también actúa el mafioso que tiene ambición… Y casi todos la tienen. (…)

La gente que dispara y falla es la que se mete en dificultades. En una ciudad como Nueva York, el fracaso es un auténtico crimen. Pero para todos, aquellos que disparan derecho y hacen su trabajo, las recompensas son inmensas. La sociedad no solamente les aprueba sino que también les adula. Todavía se escribe sobre Lucky Luciano como si hubiese sido un magnífico alcalde de Nueva York. (…)

Todos los funerales importantes de Nueva York, incluyendo los de algunas personas que hayan vivido una vida ejemplar, como por ejemplo un cardenal, básicamente son copia del funeral de Frankie Yale. Franky Yale era un buen muchacho que vivió en Brooklyn hasta 1932, y entonces se hizo muy malo y alguien colocó una bomba en su coche. La bomba funcionó bien.

El funeral de Frankie Yale fue mucho más importante que la Convención Demócrata Nacional. (…)

-¿Qué estará haciendo ahí ese sacerdote durante tanto tiempo? –interrogó Tony el Indio.

-Estará robando al viejo Dominic, ¿qué otra cosa puede estar haciendo? –razonó Big Jelly-. Mírale bien. Hay en él más agudeza e hipocresía que en un ladrón legítimo”. [5]

Al respecto recordemos que Roberto Irineu Pisani Marinho, (1904-2003) fundador del poderoso conglomerado periodístico e inmobiliario de Brasil, (Grupo Globo) se sinceró: “O Globo se hizo grande por lo que publicó, pero sobre todo por lo que dejó de publicar”.