El referente de la Unidad Académica Río Turbio (UART) en El Calafate, Gustavo Blanco,  cuestionó fuertemente a la rectora de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA), Eugenia Márquez.

Cuando todavía se espera una resolución del Tribunal de Alzada sobre la posibilidad de habilitar una urna en El Calafate para las próximas elecciones universitarias, Blanco expuso públicamente las graves diferencias que hay con la conducción de la casa de altos estudios.

En FM Dimensión, el vinculador institucional manifestó que “dentro de la política de expansión de la Universidad nunca estuvo incluido El Calafate. Nunca se discutió la división del presupuesto para abrir una unidad académica más”.

En El Calafate hay unos 120 estudiantes de carreras que ofrece la UNPA a través de la Unidad Académica de Río Turbio.

Hace más de dos años, desde la Secretaría de Políticas Universitarias de Nación se decidió la creación de un Centro Regional de Estudios Superiores (CRES) en El Calafate. Pero hasta ahora se vieron muy pocos resultados en lo referente a la apertura de oferta educativa en relación al dinero que recibe la UNPA para su funcionamiento.

En el programa Radio Activa, Blanco dijo que el presupuesto de este año para el CRES de El Calafate asciende a casi 2 millones de pesos, que se suman a los más de 1.5 millones de pesos del año pasado.

“Hasta hoy no hemos recibido un solo peso para insumos ni mobiliario. Ellos solo hacen el pago de los docentes en forma directa y nada más. No hay ningún otro tipo de aportes”, denunció Blanco.

El referente  dijo que desde la rectoría que conduce Eugenia Márquez, nunca se consultó sobre las necesidades presupuestarias del CRES, y tampoco se informó para qué se destina la partida que maneja la UNPA.

“Esos recursos son propios de nuestra localidad, que podrían estar generando empleo, o ampliando otras ofertas académicas”. Y añadió que “el rectorado no ha pagado ni siquiera el seguro” de los alumnos que realizan sus prácticas de enfermería en el Hospital.

Inclusive mencionó que a principios de este año, se les anunció a los estudiantes que el CRES de El Calafate recibirá unas 20 computadoras enviadas por Nación. Blanco dijo que esas computadoras “no llegaron nunca” y están en el rectorado.

Tras describir la falta de apoyo, Blanco aseguró que la oferta académica de la UNPA está “a préstamo” en El Calafate, y funciona gracias al esfuerzo de la UART, el Municipio, el hospital (que brinda el espacio) y la comunidad educativa.

“Nos sentimos ninguneados porque todo lo que hemos solicitado no ha tenido respuesta favorable” de parte del rectorado, remarcó Blanco en el aire de FM Dimensión. “En la universidad se discute mucho la inclusión y los derechos, pero en la práctica estamos bastante lejos”, agregó.

AUDIO: GUSTAVO BLANCO