En el acto del 25 de mayo ciertas cosas fueron al revés. Mientras la secretaria de Cultura del gobierno local Miriam Díaz basó su discurso en los valores históricos y sociales de la Revolución de Mayo,  destacando figuras como la Mariano Moreno,  y sin entrar en cuestiones de la política partidaria, el cura de la ciudad Carlos “Lito” Álvarez fue crítico con el gobierno nacional.

Durante su invocación religiosa utilizó la ironía, pero también fue suficientemente claro como para que se entendiera que el representante local de la iglesia católica no comulga con el gobierno de Mauricio Macri.

El cura comenzó su discurso como tal jugador de futbol que entra a la cancha para no dejar jugar al rival: tirando patadas directas a los tobillos.

Diciendo que la Plaza de Mayo es el símbolo de la fecha patria, no dudó en decir “hoy esta vallada, no había nadie, no se podía estar, gobierno patrios”.

Luego agradeció a las autoridades municipales por haberlo acompañado en la noche anterior en la inauguración de la capilla María Auxiliadora, ubicada en el Centro Educativo Joven Labrador que el mismo eclesiástico dirige y el que recibió varios aportes de la anterior gestión nacional.

Invocando la imagen de María Auxiliadora dijo: “la vamos a necesitar mucho a María Auxiliadora, quizás no tanto nosotros, sino los chicos que consigan trabajo en Mac Donalds, los dirigentes sociales que están presos sin condena, y los hermanos que se quedan sin trabajo”.

En otro momento, el padre “Lito”, agregó: “éramos tan tontos que no nos dimos cuenta que tener trabajo era una fiesta y no un derecho”.

El cura, conocido por su relación de amistad con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, terminó orando para que mediante Dios y María Auxiliadora exista una “patria de hermanos e iguales”.

Conocé cómo fue el acto en fotos.