FOTO: ARV.  LA CODORNIZ. AÑO XXII, N° 1118. MADRID Y BARCELONA, 21 DE ABRIL DE 1963

“Con un chiste basado en esta técnica del doble empleo hubo de vengarse una dama italiana de Napoleón I, el cual le dijo en un baile de corte, llamando la atención hacia sus compatriotas: Tutti gli italiani danzando si male. Y la señora respondió en el acto: Non tutti, ma buona parte”. (2)

Sigmund Freud (1856-1939)

Espíritu deportivo y juego limpio (fair play) son valores arraigados, casi ancestralmente, que definen la práctica de los deportes, ya sea por el mero placer de realizarlo o como una actividad laboral rentada.

El deporte contiene reglas y acuerdos que se ponen en práctica, a veces, sin necesidad de un árbitro (arbitre; ref) o mediador externo.

También es importante tener presente que la tregua olímpica (ekecheiria) se realizaba en los días en que se suspendían todas las confrontaciones bélicas, para que en paz se celebrase los juegos que convocaban a los pueblos de la época, inclusive los que estaban enfrentados destruyéndose entre ellos, con o sin intervención de algunos dioses.

Dado que en la actualidad persisten las guerras, la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció la “Creación, mediante el deporte y el ideal olímpico, de un mundo mejor en el que reine la paz”. (3)

El emblema conformado por cinco anillos de distintos colores entrelazados, (4) propuesto por el francés Pierre Coubertin (1863-1937) significa la unión de todos los habitantes en paz y armonía.

Recordemos que el verbo jugar (5) indica divertirse, entretenerse, recrearse, etcétera. Es decir, denota la capacidad del accionar por el mero placer.

El humor se construye a partir de lo impredecible, lo ridículo de las situaciones, del decir algo y actuar en sentido inverso con absoluta parsimonia, como el que no quiere la cosa, etcétera.

“El israelí Sagi Muki logró algo histórico para su país: se transformó en el primer hombre en ganar una medalla dorada en el Mundial de Judo, aunque su nombre está dando la vuelta al mundo a raíz del accionar que tuvo el egipcio Mohamed Abdelaal en la semifinal negándose a saludarlo tras ser derrotado.

ʻLamento lo que sucedióʼ, declaró Muki sobre la actitud que tuvo su rival egipcio según consignó The Times of Israel. El hecho rompió con una histórica tradición de respeto y ética dentro del mundo del arte marcial japonés.

Algo similar había sucedido en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 cuando el egipcio Islam el Shehaby perdió ante el israelí Or Sasson e hizo la reverencia de manera obligada, pero también se negó a estrecharle la mano a su oponente. ʻEs un gran avance que los países árabes acepten luchas contra Israelʼ, había señalado en ese momento Nicolas Messner, director de Judo for Pace antes de este conflicto.

Días más tarde, el Comité Olímpico Internacional decidió enviar de vuelta a su país a el Shehaby porque su conducta fue ʻcontraria a las reglas del juego olímpico y va en contra del espíritu de amistad plasmado en los valores olímpicos”. (6)

Ojalá que sean muchos los clubes deportivos, funcionarios electos y designados, centros educativos, periodistas especializados, etcétera, que incluyan en su quehacer acciones referidas al espíritu olímpico.