No fueron las tarifas, la calidad de los servicios de telefonía o de internet, la atención al público o una crisis económica lo que hizo que un temporal se llevara puesto al Consejo Administrativo de COTECAL.

En el atardecer del feriado, una asamblea de 135 socios terminó de echar al total de las autoridades de la cooperativa, terminando un proceso de varios meses cuando en una asamblea extraordinaria los consejeros se jugaron la última ficha presentando su renuncia esperando  algún clamor que nunca llegó.

Por primera vez en la historia de la cooperativa, en la asamblea anual se renovaron los 12 consejeros y los cargos del síndico titular y del suplente.

Para la ocasión se presentó una sola lista de candidatos, encabezada por Claudia Sandoval, una de las primeras socias que en mayo comenzó a pedir explicaciones por polémicas decisiones del Consejo de Administración.

Fue el despido mal ejecutado de un empleado, un carácter soberbio, la falta de lectura social  y política, una inexistente y luego mala política comunicacional con socios y medios periodísticos, lo que practicó el Consejo de Administración en lo que va del año.  Se le sumaron factores externos como la molestia de socios y la siempre presencia de la política que desde lo formal y lo informal fogoneó para que creciera el mal humor. Todo hizo a un engranaje maltrecho de una maquinaria que terminó colisionando con la realidad de una crisis institucional de la cooperativa que durante sus 47 años se jactó de sus valores cooperativos y democráticos.

Como siempre ocurre, a las reuniones de COTECAL la asamblea anual contó con un mínimo porcentaje de los más de 2 mil socios, aunque los 135 fueron muchos más de los que asistieron a las asambleas de años anteriores.

Fue una asamblea desprolija con extensos debates en cuestiones de forma, y con confusas votaciones, la que comenzó con una carta leída personalmente por la presidente Viviana Bouza.

El primero punto de extenso debate fue la propuesta de uno de los socios integrantes de la lista candidata para que todo aquel que no fuera socio dejara el lugar. La idea también recaía sobre empleados que estaban trabajando en la logística de la asamblea, un par de camarógrafos contratados  y los asesores del Consejo Administrativo, entre ellos el abogado Arturo Saa que representa legalmente a la cooperativa por ejemplo en el amparo contra el municipio local.

El orden del día estipulaba que la renovación de autoridades se realizara luego que las los consejeros salientes propusieran la aprobación de la Memoria y Balance contable del último año. Pero desde el grupo de candidatos propusieron adelantar la proclamación de las nuevas autoridades, lo que otra vez generó un extenso debate con variadas posturas sobre la conveniencia o no de cambiar de autoridades cuando aún faltaba tratar varios puntos cuyas explicaciones correspondía a los salientes.

Según registró la cobertura de ahoracalafate.com.ar, los socios igual votaron para que se hiciera el cambio de autoridades en el momento. Con confusiones sobre cómo seguir delante de la asamblea, los renunciantes se fueron levantando de a uno y dejaron la mesa central para quedarse unos minutos en el hall de ingreso y luego retirarse.

La asamblea resolvió la proclamación inmediata del nuevo Consejo de Administración. Luego votó entre dos opciones ganando la propuesta que Esteban Psaropoulos vuelva a ser el síndico de la cooperativa, junto a la suplente Mirta Ojeda. 

Por unanimidad la asamblea resolvió que los ahora ex consejeros no reciban el pago de los fondos excedentes que cada año la asamblea autoriza o no el reparto entre los concejeros y síndicos. La votación se hizo sin que se conociera el importe que le correspondía a cada consejero.

También se rechazó la memoria y balance contable del último año, cuyos informes iban a ser presentados por las autoridades salientes para que sean aprobados por los socios. El aceleramiento de la proclamación de la nuevas autoridades terminó con los consejeros salientes yéndose sin hacer la presentación y sin responder preguntas que pudieran surgir, por lo que se decidió desaprobar los informes.

Ahora, se espera que en horas más los nuevos consejeros se reúnan y definan quienes ocuparán los diferentes cargos del Consejo de Administración. Ya comunicaron que ordenarán una auditoría sobre el estado contable, la que será informada en una asamblea que se realizará en el plazo de un mes.

Algunos socios se retiraron con la duda sobre si la asamblea no será cuestionada ante el INAE (ente que regula las cooperativas) por  no haberse respetado de el orden del día, algo que reclamaron las autoridades salientes.