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OPINIÓN

22 de enero de 2018

Apuntes Ciudadanos: HUMOR SERIADO

Alejandro Rojo Vivot (1) en esta columna sigue con su saga de Humor que es un elemento tan importante en cada día. En esta oportunidad nos trae distintos ejemplos de esta herramienta y uno de los ejemplos "Polémica en el Bar" donde el humor político formó y forma parte importante de ese programa. HUMOR, POLÍTICA Y AFINES CV.

FOTO: ARV. REVISTA CARAS Y CARETAS. BUENOS AIRES, MARZO DE 1929

“El doble sentido propiamente dicho, o juego de palabras, que es, por decirlo así, el caso ideal del múltiple empleo: la palabra no sufre aquí la menor violencia; no es dividida por sílabas ni sometida a modificación ninguna. Tampoco necesita abandonar la esfera a que pertenece (por ejemplo, la de los nombres propios) e incluirse en otra diferente. Tal y como es y se halla dentro de la frase, debe, merced a determinadas circunstancias, expresar dos diferentes sentidos”. (2) 

Sigmund Freud (1856-1939)

Frecuentemente es aceptado que reírse de uno mismo es la máxima expresión del humor, tanto en lo personal como, por caso, del grupo de pertenencia. Por caso, la célebre y multitraducida historietista argentina Maitena Inés Burundarena Streb (1962): “Y en este rincón, las mujeres”, “Mujeres alteradas”, etcétera.

Por lo general, pareciera que socialmente es más permitido cuando son algunos integrantes de un país determinado los que presentan cómicamente algunas características que, de alguna manera, los identifica más allá que las mismas sean relevantes o no: una parodia (3)  de los saludos orientales, uruguayos acarreando los elementos necesarios para cebar unos buenos mates aunque estén escalando trabajosamente el más elevado de los relativamente bajos cerros en su país, etcétera.

Desde luego que esta manera de hacer humor necesita también de una particular atención del destinatario para captar lo que aparentemente tiene poca gracia salvo que se lo interprete acabadamente.

A veces surgen quienes esgrimen determinados límites que a juicio de los mismos el sobrepasarlos ofenden, denigran aún más situaciones de extrema gravedad como cataclismos, atentados terroristas, desastres ambientales, etcétera.

En tal sentido, el humor genera risas, acalorados debates y, también, intentos de algunos por instituir códigos universales del buen pensar y del buen decir.

Las comedias de situaciones comenzaron en Gran Bretaña, luego en Estados Unidos de Norte América (sitcom), para más adelante generalizarse en muchos otros países; en cada capítulo mantienen, principalmente, los mismos personajes y escenarios: Pinwright's Progress (1947), Yo amo a Lucy (1951-1957), El Chavo del 8 (1971) con 290 episodios vistos por unos 350 millones de hispanoparlantes, con acentuada presentación de escenas de mexicanos de clase baja urbana, etcétera.

En Argentina, por caso, Polémica en el bar, primero como corto humorístico (1963) en la recordada Operación Ja-Já (4) y luego en su propio y consagratorio programa semanal (1972). La política marcó cada aparición, incluyendo, en una ocasión al gobernador, senador y dos veces presidente de la Nación Carlos Saúl Menem, (1930) asiduo en ese tipo de intervenciones y, por caso, al político y legislador Nahum César Jaroslavsky, (1928-2002).

Dadas sus características donde, a partir de una idea general, cada personaje estereotipado, puede improvisar, los temas de actualidad son fácilmente incorporados contribuyendo humorísticamente a los debates políticos de los participantes de los respectivos días de emisión.

Como prueba de que muchos asuntos políticos se reiteran, a veces, cambiando algunas caras, mantienen cierta vigencia que nos debe hacer pensar también en ese sentido.

 

 (1) Miembro titular de la “Comisión Redactora reforma del Consejo de la Magistratura de la Provincia de Tierra del Fuego”. Decreto N° 2193/13. (2013).
 (2)  Freud, Sigmund. El chiste y su relación con lo inconsciente. Biblioteca Nueva. Tercera edición. Tomo I. Página 1047. Madrid, España. 1973.
 (3)  Representación o exposición humorística por la cual se imita una costumbre, estilo de expresión, etcétera, que deben ser claramente identificados por los destinatarios para que sean reconocidos y así generar, aunque sea, una sonrisa.

 (4)   Creado por Gerardo y Hugo Sofovich

 

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